Aspectos generales
Nota: En esta sección, se resume la evidencia científica publicada sobre la prevención de este tipo de cáncer. En el resto del resumen, se describe la evidencia con más detalle.
También están disponibles otros resúmenes del PDQ relacionados: Exámenes de detección del cáncer de esófago, Tratamiento del cáncer de esófago y Niveles de evidencia de los estudios sobre los exámenes de detección y la prevención del cáncer.
Quién está en riesgo
El consumo de tabaco y bebidas alcohólicas explican cerca del 90 % de los casos de carcinoma de células escamosas de esófago en los países occidentales como los Estados Unidos.[1] El reflujo gastroesofágico y el esófago de Barrett se relacionan con un aumento del riesgo de adenocarcinoma de esófago. Otros factores que pueden explicar el aumento de riesgo de adenocarcinoma de esófago incluyen la obesidad [2] y el consumo de fármacos, como los anticolinérgicos, que predisponen a la enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE) al relajar el esfínter esofágico inferior.[3]
Carcinoma de células escamosas de esófago
Factores con evidencia adecuada de aumento en el riesgo de carcinoma de células escamosas de esófago
Consumo de tabaco y bebidas alcohólicas
A partir de evidencia sólida, el consumo de tabaco y bebidas alcohólicas aumenta el riesgo de presentar carcinoma de células escamosas de esófago. El consumo de tabaco y bebidas alcohólicas explican cerca del 90 % de los casos de carcinomas de células escamosas de esófago en los países occidentales como los Estados Unidos.[1]
Magnitud del efecto: aumento del riesgo, magnitud moderada.
Diseño del estudio: evidencia de estudios poblacionales de casos y controles, y estudios de cohortes. |
Validez interna: razonable. |
Congruencia: buena. |
Validez externa: razonable. |
Factores con evidencia adecuada de disminución del riesgo de carcinoma de células escamosas de esófago
Evitar el consumo de tabaco y bebidas alcohólicas
A partir de evidencia sólida, evitar el consumo de tabaco y bebidas alcohólicas disminuiría el riesgo de cáncer de células escamosas.[1,4]
Magnitud del efecto: beneficio positivo grande.
Diseño del estudio: evidencia obtenida de cohortes o estudios de casos y controles. |
Validez interna: razonable. |
Congruencia: estudios múltiples. |
Validez externa: razonable. |
Quimioprevención
Consumo de aspirina y de fármacos antiinflamatorios no esteroides: Beneficios
A partir de evidencia razonable, se ha observado en estudios epidemiológicos que el consumo de aspirina o de fármacos antiinflamatorios no esteroides (AINE) se relaciona con una disminución del riesgo de presentar cáncer de esófago o de morir por este (oportunidad relativa [OR], 0,57; intervalo de confianza [IC] 95 %, 0,47–0,71).[5]
Magnitud del efecto: positivo pequeño.
Diseño del estudio: evidencia obtenida de los estudios de cohortes o de casos y controles. |
Validez interna: razonable. |
Congruencia: buena. |
Validez externa: razonable. |
Consumo de aspirina y de fármacos antiinflamatorios no esteroides: Perjuicios
A partir de evidencia sólida, entre los perjuicios del consumo de los AINE están la hemorragia gastrointestinal superior y los episodios cardiovasculares graves, como el infarto de miocardio, la insuficiencia cardíaca, el accidente cerebrovascular hemorrágico y la insuficiencia renal.
Magnitud del efecto: aumento en el riesgo, magnitud pequeña.
Diseño del estudio: evidencia obtenida de ensayos controlados aleatorizados. |
Validez interna: razonable. |
Congruencia: buena. |
Validez externa: razonable. |
Adenocarcinoma de esófago
Factores con evidencia adecuada de aumento en el riesgo de adenocarcinoma de esófago
Reflujo gastroesofágico
A partir de evidencia sólida, existe una relación entre la ERGE y el adenocarcinoma, en especial si la ERGE ha sido prolongada y los síntomas son graves.[6,7] En un estudio de casos y controles en Suecia, la OR de pacientes con síntomas de reflujo recidivante fue 7,7, mientras que la OR de pacientes con síntomas prolongados y graves fue de 43,5 (IC 95 %, 18,3–103,5).[8] En un metanálisis de 1128 pacientes con adenocarcinoma de esófago que participaron en 5 estudios de casos y controles, se informó de aumentos estadísticamente significativos en el riesgo de pirosis recidivante (OR 4,6; IC 95 %, 3,3–6,6), regurgitación (OR, 4,6; IC 95 %, 3,4–6,1), o ambos (OR, 4,8; IC 95 %, 3,4–6,8). La pirosis y regurgitación diarias se relacionaron con un aumento 8 veces mayor en el riesgo (OR, 8,0; IC 95 %, 4,5–14,0).[7]
Se desconoce si la eliminación del reflujo gastroesofágico mediante cirugía o tratamiento médico reduciría el riesgo de adenocarcinoma de esófago.[8,9]
Magnitud del efecto: desconocido.
Diseño del estudio: estudios de casos y controles. |
Validez interna: razonable. |
Congruencia: buena; múltiples estudios. |
Validez externa: razonable. |
Intervenciones con evidencia adecuada de disminución en el riesgo de adenocarcinoma de esófago
Consumo de aspirina y de fármacos antiinflamatorios no esteroides: Beneficios
A partir de evidencia razonable, se ha observado en estudios epidemiológicos que el consumo de aspirina o de fármacos antiinflamatorios no esteroides (AINE) se relaciona con una disminución del riesgo de presentar cáncer de esófago o de morir por este (OR, 0,57; IC 95 %, 0,47–0,71).[5,10]
Magnitud del efecto: magnitud desconocida.
Diseño del estudio: evidencia obtenida de estudios de cohorte o casos y controles. |
Validez interna: razonable. |
Congruencia: buena. |
Validez externa: razonable. |
Consumo de aspirina y de fármacos antiinflamatorios no esteroides: Perjuicios
A partir de evidencia sólida, entre los perjuicios del consumo de los AINE están la hemorragia gastrointestinal superior y los episodios cardiovasculares graves, como el infarto de miocardio, la insuficiencia cardíaca, el accidente cerebrovascular hemorrágico y la insuficiencia renal.
Magnitud del efecto: aumento del riesgo; magnitud pequeña.
Diseño del estudio: evidencia obtenida de estudios controlados aleatorizados. |
Validez interna: buena. |
Congruencia: buena. |
Validez externa: buena. |
Ablación del esófago de Barrett con displasia: Beneficios
En un ensayo controlado aleatorizado, se encontró que la ablación por radiofrecuencia del esófago de Barrett con displasia grave puede llevar a la erradicación tanto de la displasia como de la metaplasia intestinal y a una reducción del riesgo de progresión de la enfermedad.[11]
Magnitud del efecto: se desconoce el efecto sobre la mortalidad por cáncer.
Diseño del estudio: evidencia obtenida de un ensayo controlado aleatorizado. |
Validez interna: buena. |
Congruencia: un solo estudio. |
Validez externa: buena. |
Ablación del esófago de Barrett con displasia: Perjuicios
A partir de evidencia sólida, entre los perjuicios de la ablación por radiofrecuencia están la estenosis esofágica que exige una dilatación y la hemorragia gastrointestinal superior, pero en tasas bajas. Es posible que el sobrediagnóstico y el sobretratamiento del esófago de Barrett, en especial, los que no presentan displasia grave, provoquen una cantidad importante de perjuicios.
Magnitud del efecto: es posible que las tasas bajas de estenosis esofágica que exige dilatación y de hemorragia gastrointestinal superior sean una subestimación de los riesgos si esta práctica es adoptada de forma amplia por médicos con menos experiencia.
Diseño del estudio: evidencia obtenida de un ensayo controlado aleatorizado. |
Validez interna: buena. |
Congruencia: un solo estudio. |
Validez externa: los pacientes son representativos de un subconjunto de personas con displasia, en especial, con displasia grave; es posible que los médicos no sean representativos de los médicos en ejercicio ya que esta es una tecnología nueva y requiere de conocimiento especializado. |
Referencias:
- Engel LS, Chow WH, Vaughan TL, et al.: Population attributable risks of esophageal and gastric cancers. J Natl Cancer Inst 95 (18): 1404-13, 2003.
- Lagergren J: Controversies surrounding body mass, reflux, and risk of oesophageal adenocarcinoma. Lancet Oncol 7 (4): 347-9, 2006.
- Lagergren J, Bergström R, Adami HO, et al.: Association between medications that relax the lower esophageal sphincter and risk for esophageal adenocarcinoma. Ann Intern Med 133 (3): 165-75, 2000.
- Siemiatycki J, Krewski D, Franco E, et al.: Associations between cigarette smoking and each of 21 types of cancer: a multi-site case-control study. Int J Epidemiol 24 (3): 504-14, 1995.
- Corley DA, Kerlikowske K, Verma R, et al.: Protective association of aspirin/NSAIDs and esophageal cancer: a systematic review and meta-analysis. Gastroenterology 124 (1): 47-56, 2003.
- Lagergren J, Bergström R, Lindgren A, et al.: Symptomatic gastroesophageal reflux as a risk factor for esophageal adenocarcinoma. N Engl J Med 340 (11): 825-31, 1999.
- Cook MB, Corley DA, Murray LJ, et al.: Gastroesophageal reflux in relation to adenocarcinomas of the esophagus: a pooled analysis from the Barrett's and Esophageal Adenocarcinoma Consortium (BEACON). PLoS One 9 (7): e103508, 2014.
- Lagergren J, Ye W, Lagergren P, et al.: The risk of esophageal adenocarcinoma after antireflux surgery. Gastroenterology 138 (4): 1297-301, 2010.
- Spechler SJ, Goyal RK: The columnar-lined esophagus, intestinal metaplasia, and Norman Barrett. Gastroenterology 110 (2): 614-21, 1996.
- Liao LM, Vaughan TL, Corley DA, et al.: Nonsteroidal anti-inflammatory drug use reduces risk of adenocarcinomas of the esophagus and esophagogastric junction in a pooled analysis. Gastroenterology 142 (3): 442-452.e5; quiz e22-3, 2012.
- Shaheen NJ, Sharma P, Overholt BF, et al.: Radiofrequency ablation in Barrett's esophagus with dysplasia. N Engl J Med 360 (22): 2277-88, 2009.