Generalidades del tema
¿Qué es el trastorno afectivo estacional?
El trastorno afectivo estacional (SAD, por sus siglas en inglés) es un tipo de depresión que afecta a una persona durante la misma estación cada año. Es posible que tenga SAD si se sintió deprimido durante los dos últimos inviernos, pero se sintió mucho mejor en la primavera y en el verano. Algunas personas pueden tener SAD durante los meses de verano.
Cualquiera puede tener SAD, pero es más común en:
- Mujeres.
- Personas que viven lejos del ecuador, donde el tiempo con luz del día en invierno es muy corto.
- Personas de entre 15 y 55 años de edad. El riesgo de tener SAD por primera vez disminuye a medida que envejece.
- Personas que tienen un pariente cercano con SAD.
El SAD a veces se llama depresión de invierno o depresión estacional.
¿Cuál es la causa del SAD?
Los entendidos no están seguros de cuál es la causa del SAD. Pero creen que podría ser causado por la falta de luz solar. La falta de luz puede:
- Alterarle el "reloj biológico", el cual controla su ciclo de sueño-vigilia y otros ritmos circadianos.
- Causarle problemas con la serotonina, una sustancia química del cerebro que afecta el estado de ánimo.
¿Cuáles son los síntomas?
Si usted tiene SAD, es posible que:
- Se sienta triste, gruñón, malhumorado o ansioso.
- Pierda interés en sus actividades habituales.
- Coma más cantidad y tenga antojos de carbohidratos, como pastas y pan.
- Aumente de peso.
- Duerma más pero todavía se sienta cansado.
- Tenga problemas para concentrarse.
Los síntomas aparecen y desaparecen aproximadamente en la misma época cada año. La mayoría de las personas con SAD comienzan a tener síntomas en septiembre u octubre y se sienten mejor para abril o mayo.
¿Cómo se diagnostica el SAD?
A veces, puede ser difícil diferenciar entre el SAD y otros tipos de depresión, porque muchos de los síntomas son iguales. Para diagnosticar el SAD, su médico le preguntará si:
- Ha estado deprimido durante la misma estación y ha mejorado cuando cambian las estaciones durante al menos 2 años seguidos.
- Tiene síntomas que suelen presentarse con el SAD, como, por ejemplo, tener mucha hambre (especialmente con antojos de carbohidratos), aumentar de peso y dormir más de lo habitual.
- Un pariente cercano —un padre, una madre, un hermano o una hermana— ha tenido SAD.
Es posible que tengan que hacerle análisis de sangre para descartar otras afecciones que pueden causar síntomas similares, como niveles bajos de la hormona tiroidea (hipotiroidismo).
Su médico también puede hacerle una evaluación de salud mental para tener una mejor idea de cómo se siente y de lo bien que puede pensar, razonar y recordar.
¿Cómo se trata?
La fototerapia es el principal tratamiento para el SAD. También pueden ayudar los medicamentos y la asesoría psicológica.
Fototerapia
Los entendidos piensan que la fototerapia funciona reiniciando su reloj biológico. Ayuda a la mayoría de las personas que tienen SAD, y es fácil de usar.
Hay dos tipos de fototerapia:
- Tratamiento con luz brillante. Para este tratamiento, usted coloca la "caja de luz" a una cierta distancia de usted sobre un escritorio o una mesa. Luego, usted se sienta frente a ella mientras lee, desayuna o trabaja con su computadora.
- Simulación del amanecer. Para este tratamiento, se enciende una luz tenue por la mañana mientras duerme, y se hace más brillante con el tiempo, como un amanecer.
Hable con su médico acerca de la fototerapia y siga los pasos que le recomiende.
Las cajas de luz usan lámparas fluorescentes que son más brillantes que las lámparas de interiores, pero no tan brillantes como la luz solar. No deben usarse luces ultravioletas, luces de espectro completo, lámparas de bronceado ni lámparas de calor.
La fototerapia suele recetarse por entre 30 minutos y 2 horas al día. La cantidad de tiempo depende de la potencia de la luz y de si usted recién está comenzando a usarla o si la ha estado usando por un tiempo.
Es posible que usted empiece a sentirse mejor alrededor de una semana después del inicio de la fototerapia. Pero es necesario que siga con la terapia y la utilice todos los días hasta que cambie la estación. Si no lo hace, la depresión podría reaparecer.
Antidepresivos
Los antidepresivos pueden ayudar a las personas que tienen SAD. Pueden usarse solos o con fototerapia. Los que se recetan más comúnmente para el SAD incluyen:
- Inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (SSRI, por sus siglas en inglés), como paroxetina (Paxil) y sertralina (Zoloft). Los SSRI suelen probarse primero.
- Otros antidepresivos, como bupropión (Wellbutrin) y venlafaxina (Effexor).
Si su médico le receta un antidepresivo, asegúrese de tomarlo de la manera que le haya indicado. No deje de tomarlo de repente. Esto podría causar efectos secundarios o empeorar su depresión. Cuando esté listo para suspenderlo, su médico puede ayudarlo a reducir la dosis lentamente para prevenir problemas.
Asesoría psicológica
La asesoría psicológica también puede ayudar. Algunos tipos de asesoría psicológica, como la terapia cognitivo-conductual y la terapia interpersonal, pueden ayudarle a aprender más sobre SAD, a manejar sus síntomas y a ayudar a prevenir episodios en el futuro.
¿Qué puede hacer por sí mismo para sentirse mejor?
Hacer ejercicio regularmente es una de las mejores cosas que puede hacer por sí mismo. Exponerse más a la luz del sol también puede ayudar, de modo que trate de salir al aire libre para hacer ejercicio cuando haya sol. Estar activo durante los momentos de luz solar, especialmente temprano por la mañana, puede ayudarlo a tener más energía y a sentirse menos deprimido.
- El ejercicio moderado como caminar, usar una bicicleta fija o nadar, es una gran manera de empezar. Pero cualquier actividad que le eleve la frecuencia cardíaca, incluso las tareas de la casa, puede ayudar, especialmente si la hace al aire libre o cerca de una ventana donde dé el sol.
- Trate de hacer ejercicios para fortalecer los músculos al menos 2 veces por semana, como levantar pesas o subir escaleras.
El ejercicio moderado es seguro para la mayoría de las personas. Pero siempre es una buena idea hablar con su médico antes de que empiece un programa de ejercicios.
Algunas personas prueban tratamientos complementarios para ayuda con el SAD. Un ejemplo es la melatonina, una hormona que podría ayudar a regular su reloj biológico. Si usted quiere usar la melatonina u otros tratamientos complementarios, asegúrese de consultar primero con su médico. Estos medicamentos pueden interactuar con otros tratamientos.