Generalidades del tema
¿Qué es el trastorno de Tourette?
El trastorno de Tourette es una afección cerebral que comienza en la infancia. Los niños con el trastorno de Tourette producen sonidos o hacen movimientos, como tos o contracciones (fasciculaciones), que no pueden controlar. Estos se llaman tics.
Los tics suelen comenzar aproximadamente a la edad de 2 años. Pueden alcanzar su nivel más intenso a la edad de 12 años. Los tics tienden a disminuir durante los años de la adolescencia. Pueden continuar en la adultez pero ocurren con menos frecuencia y son menos intensos que en la infancia.
¿Cuál es la causa del trastorno de Tourette?
El trastorno de Tourette tiende a ser hereditario. Otras cosas que pueden aumentar el riesgo incluyen:
- Una madre que tuvo náuseas y vómito intensos durante el primer trimestre del embarazo, que pasó por estrés intenso durante el embarazo, o que bebió mucho café, fumó cigarrillos o bebió alcohol durante el embarazo.
- No tener suficiente oxígeno o irrigación de sangre durante el nacimiento.
- Un bajo peso al nacer y señales de lesión cerebral o una sección dilatada del cerebro.
- Un peso al nacer más bajo que el de un mellizo idéntico.
¿Cuáles son los síntomas?
La mayoría de los niños con el trastorno de Tourette tienen patrones diferentes de tics. Los tics pueden no ser evidentes. Pueden ser arranques de movimientos o sonidos que duran segundos o minutos.
Los tics pueden incluir:
- Una contracción ligera de los ojos.
- Sacudón del cuello.
- Tos o carraspera.
- Una combinación de movimientos y sonidos.
Es común para una persona con el trastorno de Tourette sentir un impulso en alguna parte del cuerpo que se va acumulando. Este impulso solo puede aliviarse realizando el tic. Pero no todas las personas con el trastorno tienen conciencia de estos impulsos.
¿Cómo se diagnostica el trastorno de Tourette?
Un médico puede diagnosticar el trastorno de Tourette basándose en los antecedentes de salud de su hijo y los síntomas. El médico puede querer saber si los tics le están causando problemas escolares o sociales a su hijo.
No hay pruebas para diagnosticar el trastorno de Tourette. Pero en algunos casos pueden hacerse un electroencefalograma (EEG), una MRI o análisis de sangre para detectar otros problemas de salud. Su médico también revisará si tiene el trastorno por déficit de atención con hiperactividad (ADHD, por sus siglas en inglés), el trastorno obsesivo-compulsivo (TOC) u otro problema de aprendizaje o de conducta. Estos problemas a veces ocurren junto con el trastorno de Tourette.
¿Cómo se trata?
El tratamiento para el trastorno de Tourette se concentra en ayudar a su hijo a sobrellevar los tics. Comprender cómo los tics afectan a su hijo puede ayudarles a usted y a su hijo a saber qué esperar. Puede ser útil identificar cuándo ocurren los tics y lo que pasa en la vida de su hijo durante esos momentos.
Si los tics afectan significativamente la calidad de vida de su hijo en el hogar o en la escuela, entonces podrían ser útiles la asesoría psicológica, la terapia conductual para reducir tics ( reversión de hábitos), y los medicamentos. Si su hijo tiene otros problemas médicos, estos podrían necesitar tratarse primero para ver cómo afectan los síntomas de su hijo.
¿Qué puede esperar cuando su hijo tiene el trastorno de Tourette?
A pesar de lo que pudiera haber visto en películas o en televisión, la mayoría de las personas con el trastorno de Tourette no tienen arranques incontrolables de proferir insultos o de conducta sexual.
A medida que su hijo crece, el patrón de los tics puede cambiar. Los tics pueden ir y venir a lo largo de semanas y meses. También pueden cambiar de una clase a otra. Los tics pueden empeorar y luego mejorar. Su hijo puede tener un nuevo tic, o uno viejo puede regresar.
Los tics pueden empeorar sin ningún motivo. Su hijo puede tratar de inhibir los tics, lo cual puede hacer que duren más tiempo o que sean peores que en otros momentos. También pueden empeorar cuando su hijo está enfermo, en situaciones de estrés o agitado.
Tener el trastorno de Tourette no significa necesariamente que su hijo tendrá problemas para relacionarse o dificultades en la escuela. Usted puede ayudar a su hijo a aprender a sobrellevar los tics. Comience aprendiendo más sobre el trastorno de Tourette y dando su apoyo en el hogar. Colabore con los maestros de su hijo para que entiendan cómo afectan los tics a su hijo.